Después de un día ajetreado, sería útil poder encontrar paz y tranquilidad antes de acostarse. ¡Aquí hay 5 pasos para descansar en la presencia de Dios!
- Da gracias a Dios por los regalos que te ha ofrecido a lo largo del día.
- Pídale al Espíritu Santo que le ilumine para que recuerde mejor el día.
- Repasa en profundidad cuáles fueron los principales hechos del día.
- Agradezca a Dios nuevamente por los buenos recuerdos y pídale perdón por las malas decisiones que tomó y los errores que cometió.
- Ahora, solo tienes que descansar en la presencia de Dios.
A continuación propongo la Oración de San Agustín al Espíritu Santo:
Entra en mí, Espíritu Santo,
Espíritu de sabiduría:
dame la mirada y el oído interior,
para que no me apegues a las cosas materiales,
sino que busques siempre las realidades espirituales.
Ven a mí, Espíritu Santo,
Espíritu de amor:
derrama cada vez más caridad en mi corazón.
Ven a mí, Espíritu Santo,
Espíritu de verdad:
concédeme llegar
al conocimiento de la verdad
en toda su plenitud.
Ven a mí, Espíritu Santo,
agua viva que brota
para la vida eterna:
concédeme la gracia de venir
a contemplar el rostro del Padre
en la vida y en la alegría
sin fin.
Amén.