El Purgatorio es real. Si mueres con pecados veniales pasarás un tiempo purgándolos, purificándote, hasta que tu alma libre de pecados pueda ir al paraíso.
Santa Faustina Kowalska tuvo una visión del purgatorio y lo describe de esta forma:
“Vi al Ángel de la Guarda que me dijo que le siguiera. En un momento me encontré en un lugar nebuloso, lleno de fuego y había allí una multitud de almas sufrientes. Estas almas estaban orando con gran fervor, pero sin eficacia para ellas mismas; sólo nosotros podemos ayudarlas”.
Un sacerdote comentaba en una emisora de radio que él se dedicaba a sacar un alma del purgatorio cada día, rezando el santo rosario ante Jesús Sacramentado, en el sagrario.
Ofrecía la indulgencia que ganaba con el rezo de estos rosarios por las almas más necesitadas de la Misericordia Divina.
Apariciones para pedir favores
Pascal Deloche | Godong
Muchos santos de nuestra Iglesia han tenido apariciones de almas del purgatorio que “con el permiso de Dios” se les han aparecido para pedir sus favores -una misa, el rezo del rosario,…- que los ayuden a salir de ese lugar de tormentos donde sufren mucho.
Y cuando lo consiguen, antes de emprender su viaje al Paraíso, pasan para agradecer tan grande favor.
Las siento mis hermanas, lo son. Y busco la manera de ayudarlas y crear conciencia entre los católicos sobre nuestra obligación moral de pensar en las almas benditas del Purgatorio y tenerlas presentes en nuestras oraciones. Es un acto de misericordia que agrada mucho a Dios.
San Josemaría Escrivá decía de ellas:
“Las ánimas benditas del purgatorio. —Por caridad, por justicia, y por un egoísmo disculpable —¡pueden tanto delante de Dios!— tenlas muy en cuenta en tus sacrificios y en tu oración. Ojalá, cuando las nombres, puedas decir: «Mis buenas amigas las almas del purgatorio…»
Las almas del purgatorio sufren y está tristes, así las describen estas mística que las vieron:
Cómo ayudarlas? Hay tres formas muy efectivas.
1 CON LAS INDULGENCIAS
Ofreciéndolas por ellas. Debes estar en gracia de Dios, y tener la intención de ganarla, confesarte, comulgar y rezar por las intenciones del Papa.
2 CON LA MISA
Pues los méritos de una sola misa son infinitos.
3 CON TU ORACIÓN FERVOROSA
Particularmente el rezo del santo Rosario.
Catecismo de la Iglesia Católica, 1032
Cómo ayudar a los difuntos
Desde los primeros tiempos, la Iglesia ha honrado la memoria de los difuntos y ha ofrecido sufragios en su favor, en particular el sacrificio eucarístico (cf. DS 856), para que, una vez purificados, puedan llegar a la visión beatífica de Dios.
La Iglesia también recomienda las limosnas, las indulgencias y las obras de penitencia en favor de los difuntos.
A mí me gusta mucho ofrecer todas las infinitas gracias que recibo en cada misa por mis hermanas, las benditas almas del Purgatorio.
Sé que las necesitan y nos ruegan por ellas. Es como si constantemente gritaran: “¡Ayúdennos!”.
¿Te animas a rezar por nuestras hermanas, las benditas almas del Purgatorio? Lo necesitan y te lo agradecerán.
Pide por ellas, particularmente por las más necesitadas de la misericordia de Dios.