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Muere Tomás, el niño con cáncer al que llamó el Papa

Muere Tomás, el niño con cáncer al que llamó el Papa

Tomás Vilaça, el niño portugués de siete años que sufría un neuroblastoma –un tipo de cáncer especialmente agresivo– y al que el Papa Francisco llamó en marzo para interesarse por él, ha muerto este domingo 9 de mayo.

El niño y su familia habían podido trasladarse hasta Barcelona con el apoyo altruista del futbolista Cristiano Ronaldo para recibir un tratamiento experimental en el Hospital Vall D’Hebron, que finalmente no ha dado resultado.

Hace tiempo, la familia escribió una carta al Papa y este decidió responderles con una llamada de teléfono para interesarse por el estado de salud del pequeño Tomás. Sin embargo, no obtuvo respuesta y el Santo Padre dejó un mensaje en el contestador. «Escuché una voz que decía: “Hola Ana, habla el Papa Francisco. Recibí su carta y voy a rezar por Tomás”», relató la madre del niño al periódico Jornal de Noticias.

Pero el Pontífice no se conformó con el mensaje y el 17 de marzo volvió a llamar una segunda vez, en esta ocasión a Ricardo, padre de Tomás. «Estuvimos hablando diez minutos. El Papa quería saber cómo estaba Tomás, cómo se estaba desarrollando el tratamiento y quiso saber todo sobre la enfermedad».

Esperanza y aliento

Más tarde, en una publicación en la página de Facebook Pelos sonhos do Tomás (Por los sueños de Tomás) –creada para recaudar fondos para cubrir los gastos del tratamiento– Ana y Ricardo afirmaron que la llamada de Francisco fue «totalmente inesperada, pero llena de esperanza y aliento».

Ambos se sintieron «profundamente agradecidos» al Papa «por la cercanía y la gran generosidad demostrada con nosotros y nuestro Tomás, permitiéndonos alcanzar la certeza de que estamos haciendo todo lo que está a nuestro alcance por nuestro hijo».

En familia

Tomás finalmente falleció este 9 de mayo en Portugal, en su casa, a donde se había trasladado la familia para vivir juntos sus últimos días. De esta forma, el pequeño murió en su cuarto, rodeado de sus peluches y en presencia de sus padres.

Un día después, a las 15:00 h., se celebró su funeral. Los padres accedieron a que fuera transmitido vía online ante la situación de pandemia en la que nos encontramos y para que todos los que les han acompañado con la oración estos meses, se pudieran también despedir del pequeño.

Los contemplativos no son ajenos al sufrimiento del mundo

Los contemplativos no son ajenos al sufrimiento del mundo

«La vida contemplativa, cerca de Dios y del dolor del mundo». Este es el lema de la Conferencia Episcopal Española para la Jornada Pro Orantibus 2021, que se celebrará el próximo 30 de mayo de nuevo en un contexto de pandemia como ya ocurrió en la celebración del año pasado.

«La crisis sanitaria que se desató a principios de 2020 y las consecuencias de todo tipo derivadas de la misma han sembrado nuestra cotidianidad de muerte, enfermedad, pobreza, desempleo, miedo, distancia y soledad», detallan los obispos en su mensaje.

Ante esta realidad, «el mundo ha gritado su dolor de mil maneras» y este clamor «que recorre nuestra sociedad», atraviesa también «los muros de monasterios y conventos donde hombres y mujeres del Espíritu elevan al Señor de la Vida su himno y su plegaria»

Y es que, «los contemplativos rehúyen el activismo frenético de nuestras sociedades y eligen una vía de intimidad orante y fraterna», pero esto, «lejos de ensimismarlos, esterilizarlos o alejarlos del dolor del mundo», los «convierte en faro para los mares agitados y semilla para los campos agrietados», aseguran los obispos.

La vida contemplativa «sufre cuando el mundo sufre porque su apartarse del mundo para buscar a Dios es una de las formas más bellas de acercarse a él a través de Él», explica la Comisión Episcopal para la Vida Consagrada. Los religiosos contemplativos enjugan «nuestras lágrimas» y vendan «nuestras heridas» «adorando al Señor en su templo, escuchándolo en su celda, honrándolo con su trabajo, buscándolo con su estudio, acogiéndolo en tantos que llaman a su puerta pidiendo oración y consuelo».

Por todo ello, en esta Jornada Pro Orantibus «pedimos al Señor que los custodie en su amor, los bendiga con nuevas vocaciones, los aliente en la fidelidad cotidiana y les mantenga la alegría de la fe. Y junto a ellos, presentamos al Padre, por el Hijo en el Espíritu Santo las necesidades y los padecimientos del mundo: compartiendo su dolor y su esperanza, queremos estar cerca de Dios y cerca de todos, junto al dolor de cada ser humano».

Los líderes de las Iglesias de Jerusalén piden el fin de la violencia

Los líderes de las Iglesias de Jerusalén piden el fin de la violencia

La violencia que golpea estos días Jerusalén «viola la santidad del pueblo de Jerusalén y de Jerusalén como ciudad de la paz». Es la denuncia que han hecho este lunes los patriarcas y jefes de las Iglesias de Jerusalén, expresada en una declaración conjunta.

Se suman de esta manera a la preocupación expresada un día antes por el Papa Francisco en el rezo del regina coeli por la escalada de enfrentamientos entre palestinos y las fuerzas de seguridad israelíes en el entorno de la mezquita de Al Aqsa y en el barrio Sheikh Jarrah, de mayoría palestina.

La tensión en la ciudad santa se desencadenó por las limitaciones al acceso a partes de la Ciudad Vieja durante el Ramadán y a la amenaza de desalojo que pesaba –el Tribunal Supremo ha decidido aplazarlo– sobre varias familias palestinas en Sheik Jarrah para dar paso a colonos judíos.

«Las acciones que socavan la seguridad de los fieles y la dignidad de los palestinos objeto de desalojo son inaceptables», afirman los líderes de las Iglesias de Jerusalén.

Tras reconocer que se encuentran «profundamente desanimados y preocupados» por estos acontecimientos, recuerdan que el carácter especial de Jerusalén «obliga a todas las partes a preservar la ya delicada situación de la ciudad santa». Y añaden: «La creciente tensión, apoyada principalmente por grupos de derecha radical, pone en peligro la ya frágil realidad de Jerusalén y sus alrededores».

Con todo, piden «a la comunidad internacional y a todas las personas de buena voluntad que intervengan para poner fin a estas acciones provocadoras, así como que sigan rezando por la paz».

Papa Francisco instituye el ministerio Catequista

Papa Francisco instituye el ministerio Catequista

El Ministerio de Catequistas fue instituido por el Papa Francisco este martes 11. El documento fue firmado este lunes 10, memoria litúrgica de San Juan de Ávila. El santo anciano es doctor de la Iglesia.

“La fidelidad al pasado y la responsabilidad del presente” son “las condiciones indispensables para que la Iglesia pueda llevar a cabo su misión en el mundo”, escribe el Pontífice. 

En Motu proprio, el Santo Padre contextualiza la evangelización en el mundo contemporáneo. Cita la “imposición de una cultura globalizada” y afirma: “Es necesario reconocer la presencia de laicos y laicas que, por su bautismo, se sienten llamados a colaborar en el servicio de la catequesis”.

Además, el Papa subraya la importancia de «un auténtico encuentro con las generaciones más jóvenes». Francisco observa “la necesidad de metodologías e instrumentos creativos que hagan coherente el anuncio del Evangelio con la transformación misionera de la Iglesia”.

Un nuevo ministerio, pero con orígenes antiguos

El nuevo ministerio tiene orígenes muy antiguos que se remontan al Nuevo Testamento. Germinalmente, se menciona, por ejemplo, en el Evangelio de Lucas y en las Cartas del Apóstol San Pablo a los Corintios y a los Gálatas.

«Toda la historia de la evangelización en estos dos milenios», escribe el Papa, «muestra con gran evidencia la eficacia de la misión de los catequistas». Aseguraron que «la fe era un soporte válido para la existencia personal de todo ser humano».

El Pontífice recordó que, en la historia, muchos catequistas han llegado al punto de “incluso dar la vida” por la evangelización. Por eso, desde el Concilio Vaticano II, se ha ido tomando conciencia de que “la tarea del catequista es de suma importancia”.

La catequesis es una acción necesaria para el “desarrollo de la comunidad cristiana”, señala el Santo Padre. Aún hoy, prosigue Motu Proprio, “muchos catequistas competentes y perseverantes” llevan a cabo “una misión insustituible en la transmisión y profundización de la fe”.

Una “larga serie” de catequistas, santos y mártires “marcó la misión de la Iglesia”. Fueron “una fuente fecunda para toda la historia de la espiritualidad cristiana”, comenta el Papa.

Transformar la sociedad a través de los valores cristianos

Francisco exhorta a valorar a los laicos que colaboran en el servicio de la catequesis. Según el Pontífice, se encuentran con «los muchos que esperan conocer la belleza, la bondad y la verdad de la fe cristiana».

Es tarea de los pastores, subraya también el Santo Padre, reconocer “los ministerios laicos capaces de contribuir a la transformación de la sociedad”. A través de ellos se produce una “penetración de los valores cristianos en el mundo social, político y económico”.

Evite las formas de clericalización

El catequista está llamado a expresar su competencia en el servicio pastoral de transmitir la fe desde el primer anuncio hasta la preparación para los sacramentos de la iniciación cristiana. Esto incluye la formación permanente.

Pero todo esto sólo es posible «a través de la oración, el estudio y la participación directa en la vida de la comunidad». Según el Papa, la identidad del catequista debe desarrollarse con “coherencia y responsabilidad”.

Recibir el ministerio laical de un catequista, de hecho, “da un mayor acento al compromiso misionero típico de cada bautizado”. Y debe realizarse – recomienda Francisco – «de manera completamente secular, sin caer en ningún intento de clericalización».

La Congregación para el Culto Divino publicará el Rito de Institución

El ministerio laico de los catequistas también tiene “un fuerte valor vocacional”. Es «un servicio estable prestado a la Iglesia local». Requiere “el debido discernimiento por parte del obispo” y un Rito Institucional especial que la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos publicará en breve.

Al mismo tiempo, señala el Santo Padre, los catequistas deben ser hombres y mujeres «de profunda fe y madurez humana». Los catequistas deben participar activamente en la vida de la comunidad cristiana. Deben ser capaces de “acogida, generosidad y vida de comunión fraterna”.

Los catequistas deben formarse desde un punto de vista bíblico, teológico, pastoral y pedagógico. Deben haber madurado la experiencia previa de catequesis. Los catequistas deben colaborar fielmente con los sacerdotes y diáconos. Deben «estar animados por un verdadero entusiasmo apostólico».

La invitación del Papa a las Conferencias Episcopales

Finalmente, el Papa invita a las Conferencias Episcopales a “hacer realidad el ministerio de los catequistas”. Para el Pontífice, es necesario establecer los criterios formativos y normativos necesarios para acceder a ella. También es necesario encontrar formas más coherentes para el servicio. Todo esto debe estar de acuerdo con el Motu proprio que también pueden recibir las Iglesias orientales.

Imagen de la Divina Misericordia no se incendia en siniestro

Imagen de la Divina Misericordia no se incendia en siniestro

El suceso ocurrió en el barrio Ciudad Nueva de Caaguazú, Paraguay. Augusto Ortiz Espínola, el padre de la familia, descansaba después de un largo día de trabajo. Mientras, su esposa e hijas habían ido a buscar algo para cenar.

De pronto, un cargador enchufado explotó y comenzó un voraz incendio. “Estaba en una de las piezas cuando empecé a sentir y oler el humo. El fuego fue rápido y apenas pude salir”, comentó Augusto a un medio local.

Como resultado, su casa y todas sus pertenencias se consumieron en las violentas llamas. Pero en medio de la desesperanza, encontraron consuelo en la inexplicable preservación de la imagen de la Divina Misericordia.

Una imagen de la Divina Misericordia y sus flores, que son artificiales no se quemaron, quedaron intactas. Eso nos da una señal muy fuerte y nos demuestra que no todo está perdido. Nos da la esperanza de que vamos a recuperar otra vez todo”, dice Augusto.

Créditos: cronica.com.py.

Toda su familia se reconoce muy devota y quedó sorprendida -al igual que sus vecinos- por el inexplicable suceso. “Para nosotros es un gran milagro, por eso vamos a seguir luchando para recuperar nuestras cosas”, afirmó.

Augusto comentó que no puede dejar de mirar la imagen de Jesús, y que en medio de una situación tan difícil, le ayuda a no perder la fe tras vivir ese terrible suceso.

Créditos: Cronica.com.py

El hermano de Augusto, Barderley, también manifestó su sorpresa por lo ocurrido: “La estructura de la casa es totalmente de madera, ¿Cómo pudo esa imagen y esas flores, que son de papel, no quemarse?”.

En medio de la angustia por la destrucción del terrible incendio, esta familia encuentra consuelo en la imagen de la Divina Misericordia. Más aún, decidieron que hacerle un pequeño oratorio dentro de la vivienda, para que pueda cuidar de todos ellos. “Vamos a hacerle una casita para que se quede acá con nosotros y cuide de nosotros y de nuestra casa”, concluyó Barderley.